miércoles, 2 de diciembre de 2009

Necesidades y Deseos

Señor, me siento frustrado por el incesante aumento del coste de la vida. Tengo necesidades que exigen satisfacción inmediata. Necesidades personales y familiares. Recuerdo ahora tus palabras: «No os inquietéis por vuestra vida, sobre que comeréis, ni por vuestro cuerpo, sobre qué os vestiréis» (San Mateo, 6: 25). «…bien sabe vuestro Padre celestial que de todo eso tenéis necesidad» (San Mateo, 6: 32). Líbrame de la duda. Seguramente tienes algo que enseñarme, ¿Acaso no distingo entre necesidad y deseo? Enséñame. Que nunca tenga yo tanto que deje de consultarte. Cuanto más necesitado estoy, más me acerco a Ti.

No hay comentarios:

Seguidores